Quién está sufriendo más fuertemente el estallido de la burbuja inmobiliaria son los autónomos y pymes que trabajan alrededor de este negocio. Los subcontratados de las subcontratas. Este colectivo de miles de albañiles, fontaneros, carpinteros, pintores, etc, que trabajaban en las obras hoy casi paradas, en muchos casos eran autónomos a los que se les exige, entre otras cosas, un seguro de responsabilidad civil , en previsión de los daños que puedan ocasionar durante su trabajo. Estas pólizas que cuestan desde los 300 a los 3.000€ al año, según profesiones, compañías, garantías y franquicias, antes se pagaban con alegría y ahora cuesta mucho esfuerzo por la escasez de trabajo. Tanto, que muchos profesionales están pensando en deshacerse de este "gasto". Error. Ya hable hace meses de que en tiempo de crisis es más hábil no prescindir de garantías. Pero en este caso de los autónomos, y pymes, en que el trabajo baja si hay posibilidad de ajustar el precio del seguro de respons